En el marco del Día de la Independencia, la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner reapareció con un mensaje grabado que fue emitido durante el festival organizado en Parque Lezama, en la Ciudad de Buenos Aires. Desde su prisión domiciliaria, la exvicepresidenta cuestionó con dureza al gobierno de Javier Milei, al que acusó de consolidar “un país para el 30% más rico”.

A pesar de estar atravesando lo que describió como una “fortísima gripe”, Cristina Kirchner expresó:

“Como argentina, no recuerdo otro 9 de Julio como este. Desde 1956, cuando derrocaron a Perón y trajeron al FMI, no tuvimos este grado de dependencia”.

La exmandataria advirtió sobre la pérdida de soberanía económica y planteó una pregunta clave:

“¿Somos realmente libres o independientes? ¿O estamos otra vez ejecutando políticas dictadas desde afuera, aceptando sin chistar condiciones del FMI?”.

Críticas al endeudamiento y al modelo económico

Kirchner alertó sobre los compromisos de deuda externa que deberá afrontar el país en los próximos años:

“Los peores vencimientos con el Fondo y los bonistas serán para los próximos dos gobiernos. Aún no se ha pagado un solo peso de capital. A partir de 2027, hay una muralla infranqueable que debe pagarse en dólares contantes y sonantes”.

También mencionó el volumen de la deuda:

“Le debemos al Fondo más de 65.000 millones de dólares: 45.000 que le dieron a Macri, 12.000 que ya le dieron a Milei, y pueden ser más, porque le han prometido otros 8.000 millones”.

En ese marco, comparó al FMI con “el prestamista del barrio que te chupa la sangre” y recordó que Argentina es hoy el principal deudor del organismo a nivel global.

Cuestionamientos a Caputo y advertencia sobre el modelo social

Cristina también dirigió críticas directas al ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, y al modelo que estaría intentando consolidar el Gobierno:

“Mientras el pueblo argentino está desorientado, el desgobierno de Milei sobrevive con préstamos. Quieren hacer cerrar los números macroeconómicos haciendo desaparecer a la clase media”.

“Quieren un modelo a la peruana, el que tanto le gusta a Caputo. Un país para el 30% más rico, y el resto condenado a vivir sin movilidad social, sin dignidad y sin futuro”, sentenció.

El mensaje de CFK marcó un posicionamiento político fuerte en un 9 de Julio atravesado por tensiones sociales y económicas, y volvió a ubicar a la exmandataria como una figura central del discurso opositor.